CUANDO te alejaste lentamente
yo de ti me despedía
no pude contenerme
y lloré con desesperación,
mi vida se acababa
mí corazón no tenía amor,
se había roto en mil pedazos;
te despedías de mi,
quise arrojarme a tus brazos
decirte que te quería a ti,
no sé ni cómo pude contener
tanto tiempo el llanto
que anudaba mi corazón
yo te quería tanto
cuando destrozaste mi ilusión.
Me mentiste tanto tiempo
no pude darme cuenta,
que tonta he sido
cómo pude no saberlo
desde antes habías herido
a un pobre amor perdido,
pero el día que llore
no supe ni qué hacer,
la cabeza me daba vueltas
y no te dejaba de querer
recuerdo dolorosamente…
el día que llore.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario